Energía en el País Vasco

El ciclo combinado

Análisis de las previsiones energéticas a largo plazo

Desde 1960, la demanda energética vasca creció a ritmos importantes de forma paralela a la evolución económica, hasta un nivel que mantuvo con las crisis del petróleo del 73 y 78. En la década siguiente, la conjunción de las políticas industriales vascas de reconversión, eficiencia energética e innovación permitieron un importante crecimiento de la actividad económica vasca disminuyendo los niveles pasados de consumo energético. Esta situación se prolongó hasta finales de los años 90, cuando creció la demanda fruto de un importante crecimiento de la actividad económica y de un marco de moderados precios energéticos. A pesar de ello, la demanda se mantuvo a niveles similares a la de los años 70. Mirando al futuro, los estudios de las tendencias de previsiones energéticas realizados a medio-largo plazo indican que, en Euskadi, la mayor movilidad y el aumento del uso del transporte privado por carretera de forma importante y, en menor medida, el paulatino aumento de los niveles de servicio y confort en el sector terciario, serán los sectores más directamente responsables del aumento del consumo final en los próximos años. Además, la demanda energética se verá afectada por la mayor autogeneración eléctrica en sustitución de las importaciones. Los análisis realizados indican que, sin una política institucional de ahorro y eficiencia energética, las necesidades energéticas en el periodo 2000-2020 se incrementarían más de un 60%. Para llevar a cabo un control efectivo del consumo energético será por tanto imprescindible una polótica energética mantenida a largo plazo, que posibilite un uso más racional y un menor impacto ambiental derivado del consumo energético.

Escenario tendencial de demanda energética 2000-2030

DEMANDA TENDENCIAL

El escenario tendencial elaborado para poder analizar adecuadamente las posibles tendencias energéticas de la demanda vasca a largo plazo cuenta con un horizonte fijado en el año 2030. Las principales conclusiones con foco en el año 2020 y referencia 2010 en él incluidas se resumen de la siguiente manera:

  • La demanda energética vasca crecerá un 19% en 10 años, teniendo en cuenta los efectos de la crisis actual, lo que supone una tasa media anual del 1,8%.
  • La demanda eléctrica vasca, con un crecimiento medio anual de 1,6%,se incrementará en un 17%. Se asume que el mix de suministro eléctrico se compondrá de un 51% con origen en centrales térmicas, un 17% de cogeneración y renovable, y el 32% restante de importaciones.
  • Las necesidades de gas natural aumentarán en un 30% a lo largo del periodo con crecimientos en todos los sectores, debido en gran medida a la recuperacién de consumos, sustituciones y otros crecimientos sectoriales.
  • El aprovechamiento de los recursos renovables se incrementará en unos 100.000 tep (toneladas equivalentes de petróleo), lo que significa un crecimiento del 18% en 10 años. Esto significa que la participación de las renovables en el consumo final podrá alcanzar una cuota del 9%.
  • El consumo final en el conjunto de sectores se incrementará un 13% con respecto a 2010. Los sectores que liberarán el aumento tras la recuperación económica serán la industria y el transporte.

Escenario tendencial de consumo sectorial 2000-2030

La estructura económica de Euskadi también ha evolucionado paralelamente al crecimiento económico. En 2008 el sector servicios llegó a generar dos tercios del PIB (62%), mientras que la industria reducía su peso al 28% y el transporte aumentaba al 5%. El sector de la construcción también registró un aumento hasta alcanzar un 9% sobre el PIB como respuesta al boom inmobiliario iniciado a comienzos de la década, mientras que por otro lado destaca el descenso de la aportación económica del sector primario, que ha pasado a representar tan sólo el 1%.

Consumo interior bruto y consumo final energético

La industria constituye el sector de mayor consume de energía en la CAPV, con una participación de alrededor del 45% sobre el consumo final, en claro contraste con lo que sucede en otras regiones y países. Adicionalmente, el sector industrial vasco está caracterizado por la existencia de un conjunto de subsectores industriales muy intensivos energéticamente como es el caso de la siderurgia, fundición, cemento, papel, vidrio y químico, que suponen en total alrededor del 72% del consumo energético industrial. Es destacable el proceso de gasificación del sector, ya que el gas natural representa actualmente aproximadamente el 40% del consumo industrial y resta solamente un 7% de gasóleos, coque de petróleo y fuelóleos.

Consumo final por energías